viernes, 7 de enero de 2022

¿Cómo sigo?

Hoy no tengo con quien compartir las ideas, los viajes, el trabajo, la política, la historia, el mundo, quiénes somos y a dónde vamos.

Todas las preguntas me llevan a vos, todas las respuestas me llevan a vos.


Sigo adelante con la misma tristeza, con un dolor que no termina y cada vez más ganas de encontrarte.


Pero sigo, porque siento que cumplo con ese pacto que hicimos: el de vivirla, disfrutarla y saber que estas al lado mío siempre que te necesite.


No estoy sola, nunca lo voy a estar. Te llevo en cada decisión que tenga que tomar. Por ejemplo ésta, la de escribir como pueda, lo que pueda, aunque suene horrible. Aunque todo te quede chico, escribir siempre por siempre. Porque todo pasa, pero las palabras quedan.


Te prometo si, honrarte cada vez que ponga el bien común por encima del resto.

Donde elija las palabras antes que la guerra, y la guerra antes que la injusticia.

Te llevo en las malas y en las buenas, pero de a poco voy encontrándote en mi.


Me falto decirte mil veces más todo lo que sos para mí y al mismo tiempo no me queda nada por decirte.


Al revés de lo que dicen, cuando mejor estoy es cuando mas conectados estamos

y cuando no puedo más de la tristeza es porque me siento lejos de vos. 


Fuiste una enciclopedia y también un experto en hacerme sentir segura.

Un historiador del mundo y de la vida.

Y eso ni voy a salir a buscarlo, ese sos vos y nadie más.


¿Cómo sigo?